Publicado por Juan Pablo el 23.Sep.2004 | Comentarios (1)
Mientas degustaba un artículo de XML, mi mente hacía swapping - como decimos los computines. De pronto comencé a pensar en los impulsos y en el control de ellos - ¿por qué?, porque quería hacer algo que dije que no haría, pero que en el fondo de mi ser si quiero hacer. Mhhhh... suena bastante ilógico pero este tipo de disyucción es bastante común en la mente humana muchas veces al día.
Actualmente estoy leyendo uno de mis libros favoritos, cae en esa categoría porque es la segunda vez que lo leo, El Arte de la Felicidad una estupenda guía para iniciar la búsqueda de la verdadera felicidad, el protagonista es el Dalai Lama.
El Dalia explicita claramente aquellos placeres pasajeros y aquellos duraderos; estos últimos otorgan felicidad los otros no. Saber diferenciarlos es lo difícil, aunque muchas veces nos damos cuenta pero nos engañamos a nosotros mismos...lo cual está mal.
Ahora bien, lo que quiero hacer es ¿duradero o pasajero? - (lapso de 3 minutos) - creo que es duradero ... mhhhhh entonces lo haré.
Enlace Permanente, Comentarios (1), Publicada en: Personal
Hola: Tenís que puro hacerlo si lo que va a provocar, es felicidad en tí. Hazle caso al Dalai, mira que es el último que queda... Por otro lado, gracias por tu artículo de RSS, Sindicación y otras hierbas. Me aclaró un montón de conceptos que ubicaba pero no los tenía ordenaditos entre mis neuronas, ahora que empecé como blogger. Gracias de nuevo, y seguiré visitando tu restaurante, gracias al "chico muy amable"... :-)
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